Con palas, arena y maquinaria rentada, integrantes del sindicato de taxistas de Mahahual iniciaron por cuenta propia un programa emergente de bacheo en las calles más dañadas de la comunidad. La decisión surgió después de meses de solicitar apoyo a las autoridades sin obtener respuesta.
Las reparaciones se concentran en puntos críticos de la vialidad donde circular se había convertido en un reto para conductores y peatones. Los propios trabajadores del volante señalan que los baches no solo dificultan el tránsito, sino que también ponen en riesgo la seguridad de quienes utilizan estas vías diariamente.
El dirigente del gremio, Juan Manuel Lanz, explicó que el deterioro constante de las calles afecta directamente al servicio de transporte, pues los vehículos sufren daños frecuentes. Para muchos choferes, estas averías representan gastos que superan sus ingresos semanales.
El mal estado de las vías impacta también en la imagen turística de Mahahual, uno de los destinos más importantes de la Costa Maya. Visitantes y habitantes coinciden en que la primera impresión que se llevan al llegar es la de una carretera de acceso prácticamente intransitable.
Aunque los taxistas han asumido temporalmente la tarea de mejorar la movilidad, insistieron en que la solución debe venir de un plan integral de rehabilitación vial. Su mensaje es claro: la comunidad necesita calles seguras y dignas que respondan a las necesidades de quienes habitan y visitan la región.
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