Cancún atraviesa una etapa de cambio en las relaciones de pareja. De acuerdo con cifras mencionadas durante el II Congreso de la Familia en José María Morelos, en esta ciudad se registran en promedio 96 divorcios al mes, un reflejo de los retos que enfrentan las familias ante las exigencias del ritmo de vida actual.
El sacerdote Miguel Enrique López Pérez, capellán de la Iglesia Universitaria Anáhuac Cancún, explicó que la principal causa de separación es la falta de comunicación, un problema que se acentúa con las presiones laborales, la incertidumbre económica y los modelos sociales centrados en el consumo y la inmediatez.
En su mensaje, el padre López recordó que el matrimonio no solo se sostiene con amor, sino con voluntad, perdón y diálogo. Subrayó que muchas parejas enfrentan crisis que podrían superarse si existiera mayor apertura para escuchar, comprender y acompañar al otro en los momentos difíciles.
Durante el encuentro, se destacó la importancia de fortalecer la preparación prematrimonial y brindar acompañamiento a los matrimonios jóvenes. La orientación espiritual y la convivencia comunitaria, dijo, pueden ser herramientas que ayuden a reconstruir la confianza y mantener viva la promesa del “para siempre”.
Más allá de las cifras, el aumento de divorcios en Cancún refleja una realidad que interpela a toda la sociedad: la necesidad de volver a mirar a la familia como un espacio de diálogo, fe y compromiso mutuo, donde los valores y el amor sigan siendo el cimiento de las nuevas generaciones.
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